Entiendo que lo dice desde la ironía, pero bien mirado tiene razón. Quizá sea irracional el intento de mantener la coherencia, la ecuanimidad de las decisiones de Cristina Fernández y su gobierno, toda vez que si pagara ahora, tendría en el actual escenario, dos ó tres años de bonanza, de ingreso de divisas, lo que le permitirían incluso ganar las próximas elecciones con el candidato que ella decida.
Porque, pensándolo bien: para los de recontraizquierda igual seguirá siendo un gobierno proimperialista / propatronal / derecontraderecha; para los de recontraderecha igual seguirá siendo un gobierno populsita / chavista / neomarxista; para los liberal progresistas que en medio de sus poluciones nocturnas se llaman a sí mismos de centroizquierda igual en los próximos meses culparán al gobierno por todas las consecuencias negativas de la decisión tomada; los liberal conservadores que en sus sueños se llaman a si mismos centristas moderados es en definitiva lo que dicen a viva voz que habría que hacer ignorando las consecuencias.
Si de todas maneras miríadas de ciudadanos insensatos anuncian que es la década perdida, que se acerca el 2001. Que el gobierno les de el gusto: que le pague mañana a los buitres, después que se nos venga la RUFO, que el país se desbarranque y vuelva al punto de partida, que en seis o siete años vuelva el 2001, o quizá peor. Pero el año próximo ganen las elecciones, y dejen sangrando varios sueños de regreso a la gloria. Y en dos o tres décadas empezamos de nuevo.
O acaso este no es un gobierno de gente de la peor calaña, sumergido en la corrupción, que sólo piensa en su personalísimo beneficio.
...la historia tañe sonora su lección como campana: para gozar el mañana hay que pelear el ahora; con tu puedo y con mi quiero, vamos juntos compañero...
(Mario Benedetti)
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