Luego de las fábulas sobre el acuerdo, se conocen los detalles.
Informa El Mundo en su artículo "Argentina concreta la propuesta de indemnización a Repsol por YPF":
"...la oferta de la Casa Rosada consiste en emitir un bono del Estado o un cupón 'en dólares a 10 años, por una emisión aproximada a los 5.000 millones de dólares, unos 3.686 millones de euros, con un interés de entre un 8,25% y un 8,70% anual'. El papel a emitir por parte del Estado argentino tendrá 'un plazo de gracia para comenzar a liquidar intereses de entre dos y cuatro años' y esos dividendos 'se pagarán íntegramente en el mercado de capitales de Buenos Aires'."
Tal y como solía decir Vladimir Ilyich Lenin: a veces hay que retroceder un paso para luego avanzar dos. Lo digo básicamente porque por mucho que algunos se escandalicen, Vaca Muerta será la clave para que no retrocedamos en las próximas décadas.
Me pregunto: ¿Alguien realmente pensó que en el planeta tierra en 2014 había una opción mejor? Le doy una vuelta de tuerca, y me pregunto: ¿Alguien cree que con las condiciones objetivas y subjetivas de nuestro país se puede plantear otro camino?
Cuando la recuperación del 51% de YPF estaba viviendo en España, donde tuve debates muy fuertes por esta cuestión. Mucha gente sensata que entendía, o al menos escuchaba, pero también mucho necio que repetía sin pensar lo que había escuchado o leído en los medios. Tengo claro que la pretensión de un grupo importante de los accionistas de Repsol era ir hasta el final con el reclamo, por insensato que parezca, sólo para hacer todo el daño que pudiesen, con Brufau a la cabeza.
Si hacemos los números bien, si analizamos desapasionadamente la cuestión, la hicimos bien. En términos económicos en un par de años, mucho antes de terminar de pagar los bonos, el valor del 51% de YPF va a ser muy superior a esos 5000 millones de dólares más la tasa ofrecida, y lo que para Repsol eternamente tendría un valor financiero: Vaca Muerta, nosotros lo estamos motorizando y le damos un valor económico objetivo, no sólo en ingreso de divisas, que lo habrá gracias a los acuerdos que ya se conocen y los que vendrán, no sólo por la gran actividad económica que generará el emprendimiento, también le dará sustentabilidad a nuestra economía de cara a intentar encarar el desarrollo con más decisión.
Es verdad que pudimos haber intentado no pagar nada, pero en el mundo en el que vivimos no hay otra alternativa que la de ser pragmáticos.
No puedo pensar la gestión de un país, en términos diferentes de la gestión de mi propia vida: no siempre hago lo que quiero, generalmente hago lo que puedo, pero al final me salgo con la mía y la paso lo mejor posible, siempre intentando la sonrisa en la cara.
La noche que desciende de nuevo hacia la luz, despertando las flores en valles taciturnos, refrescando el regazo del agua en las montañas, lanzando los caballos hacia azules riberas, mientras la eternidad, entre luces de oro, avanza silenciosa por prados siderales.
(Vicente Gerbasi)
sábado, 22 de febrero de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario