Quería decirles, con la misma claridad y toda la contundencia que me sea posible, a todos aquellos que ponen en duda mi integridad y mi inteligencia por mis preferencias políticas resultantes de analizar con honestidad intelectual los datos duros de la realidad, que no ofende quien quiere, sólo lo hace quien puede.
O como dijo Gabriel Impaglione seguramente refiriéndose a otra cosa (o no):
"Yo prefiero intentar oficios con la vida,
teñir de utopía la canción imperfecta.
Faltar el respeto a sus señorías
con el amor reventándoles en la cara.
(Allí hace justicia la poesía)"
Me pregunto: ¿Es necesario decirlo más claro?
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