La mujer imposible,
La mujer de dos metros de estatura,
La señora de mármol de Carrara
Que no fuma ni bebe,
La mujer que no quiere desnudarse
Por temor a quedar embarazada,
La vestal intocable
Que no quiere ser madre de familia,
La mujer que respira por la boca,
La mujer que camina
Virgen hacia la cámara nupcial
Pero que reacciona como hombre,
La que se desnudó por simpatía
Porque le encanta la música clásica
La pelirroja que se fue de bruces,
La que sólo se entrega por amor
La doncella que mira con un ojo,
La que sólo se deja poseer
En el diván, al borde del abismo,
La que odia los órganos sexuales,
La que se une sólo con su perro,
La mujer que se hace la dormida
(El marido la alumbra con un fósforo)
La mujer que se entrega porque sí
Porque la soledad, porque el olvido...
La que llegó doncella a la vejez,
La profesora miope,
La secretaria de gafas oscuras,
La señorita pálida de lentes
(Ella no quiere nada con el falo)
Todas estas walkirias
Todas estas matronas respetables
Con sus labios mayores y menores
Terminarán sacándome de quicio.
"Mujeres", del genial poeta chileno Nicanor Parra.
La imagen que ilustra esta entrada corresponde a la obra "Cuatro mujeres", del artista colombiano Fernando Botero, un óleo sobre tela de 1987.
Esa Mujer, de Peteco Carabajal. Cantante, compositor, guitarrista y violinista, nació el 25 de mayo de 1956 en La Banda, Santiago del Estero. Esa mujer que yo había visto en mis sueños, se besa con el misterio y perfuma la realidad, y desconoce el dolor.
Y todavía han existido otras y, maravillosamente, yo las he conocido.
viernes, 18 de mayo de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Hermosa Esa Mujer. Gracias Peteco. Gracias Rafael.
ResponderEliminar