viernes, 26 de febrero de 2016

Enterraré los nombres, los rótulos, la historia

"Hay momentos en la vida política cuando se debe estar en el lado correcto y perder."

(JK Galbraith)


-- ** -- ** -- ** --

Antes de este intento de análisis preliminar de la actual gestión a cargo del poder ejecutivo, cabría aclarar que la analizaré con los mismo parámetros que analizaba la anterior. No puedo decir: igual que siempre, porque con los años vamos aprendiendo qué mirar, cómo mirarlo, y afinando el criterio.
Los ítems que evalúo son tres (3), los tres son bastante objetivos, todos económicos: cuál es el poder adquisitivo de mis círculos más próximos, cuál es la evolución de la distribución del PBI entre el mundo del trabajo y el del capital, y cómo impactan las políticas implementadas en los diferentes segmentos de la pirámide social argentina.
Aquellos puntos de análisis que tienen que ver con cuestiones políticas, tales como el funcionamiento general de las distintas instituciones, se los dejo a ustedes, que son más sensibles. Quizá por deformación profesional, no puedo evaluar aquello no puedo mensurar. No es que no tenga opinión, y que ésta no influya en mis decisiones electorales, pero queda para mi evaluación personal, y me parece que no es de recibo abrir juicios de valor a partir de mi subjetividad.

En lo que refiere al poder adquisitivo de mis círculos más cercanos, mi familia nuclear, mis amigos y mis familiares, debo decir que de manera clara éste se ha visto disminuido, toda vez que nuestros ingresos han crecido menos que nuestros gastos. No todos los gastos se han incrementado con la misma intensidad, pero hay algunos de impacto mensual que están incrementándose de manera exagerada, y no estamos en condiciones, ni yo ni nadie de los que pertenecemos al mundo del trabajo, a modificar el nivel de ingresos en la misma proporción. Ese poder lo tiene el capital. Es decir, que accedemos a menos cenas en la parrilla de enfrente, a menos viajes de placer a Entre Ríos, a menos botellas de buen vino, a menos libros, a menos pantagruélicas con amigos que antes.
En este punto debo decir que si bien durante la gestión anterior morigeró la dinámica positiva sobre el final, hay consenso respecto a que de los 12 años, los primeros 9 la situación era siempre al alza, el poder adquisitivo, y por tanto, la participación en el PBI de los salarios ha ido mejorando. En los últimos 3 se equilibró. Ciertamente en 2014 la devaluación impactó negativamente, pero en 2013, y sobretodo en 2015, esta caída se compensó. Si evitamos los análisis más tendenciosos, la compensación fue equilibrada.

Respecto a la distibución del PBI entre el mundo del trabajo y el del capital, al finalizar la anterior gestión ésta era de entre el 45 y el 47%, según quién lo mida. Se me dirá que aún es pronto, pero está bastante claro que esta relación se está modificando a favor del capital. Las proyecciones más optimistas hablan de una corrimiento del 4% al 5% para el primer año, pero si se cumplen los pronósticos más pesimistas podría llegar al 10%.

Y finalmente, respecto al impacto de las medidas en los distintos grupos de la pirámide social, siendo éste el más subjetivo de los tres, debo decir que todas las políticas anunciadas benefician al segmento del tope de la pirámide, el grupo ABC1 constituido por el 5% de la población (más de 55 mil pesos mensuales de ingresos). Tanto es así que desde el oficialismo están evaluando con los medios oficialistas cómo modificar la percepción de que gobiernan para los ricos, es decir que incluso entre la mayoría de sus votantes esto queda claro. Las políticas que intentaron apuntar a beneficiar los segmentos inferiores, tal el caso de la modificación de ganancias, apunta al segundo tramo, constituido por el 19% (entre 20 mil y 55 mil pesos de ingresos), y por cierto no está muy claro que efectivamente haya algún beneficio. De ahí hacia abajo, el 76% inferior de la pirámide social, no ha recibido hasta ahora ninguna noticia positiva, más bien, todo lo contrario, dado que todo indica que en las paritarias es francamente improbable que recuperen la perdida de poder adquisitivo generado por las políticas del PRO, y antes por su enunciación, ya desde la segunda quincena de noviembre del año pasado.
Tal y como dije, se me antoja que éste es más subjetivo, pero en líneas generales en la anterior gestión las decisiones apuntaban a beneficiar de manera más o menos equilibrada a los distintos segmentos de la población. En mi opinión con más intensidad al 14% que compone la clase baja.
Quizá debamos recordar que, según la consultora de Oliveto, citada por muchos medios de comunicación, de diferentes miradas (tal el caso de los periodistas económicos de Clarín, o de Roberto Navarro, a modo de ilustración), la pirámide se distribuía a fines del año pasado del siguiente modo: un 5% ABC1, un 19% Clase media alta, un 31% clase media, un 31% clase media baja, y un 14% clase baja.

En líneas generales la evaluación es negativa, con una performance peor para lo que ingenuamente imaginaba una derecha con deseos de construir poder, no sólo mediático. Lamentablemente no vislumbro que vaya a ser corregido este derrotero. Mi subjetividad así me lo indica, es verdad, pero las políticas implementadas hasta aquí me lo ratifican, en lo que refiere a la evolución de la economía en general, y el camino anunciado.
Ojalá su fanatismo por las encuestas y los focus group les hagan modificar el camino elegido. Claro que lo que hasta aquí retrocedimos, será de improbable recuperación, toda vez que no parecen errores, sino consecuencias deseadas de políticas elegidas por convicción.


-- ** -- ** -- ** --

Guillermo Moreno, dijo que prefiere que Gioja presida el PJ.
No tengo problemas siempre que se respete la ideología del FPV. No quiero otra vez el PJ amable con el establishment, sometido a la ideología del libre mercado.
Pero agregó, refiriéndose a Sergio Massa: "No hay espacio para que presida el PJ, que es lo que quiere Macri , pero sí para que venga a debatir con el resto de los compañeros".

Tendrán que disculparme, pero mi estomago no lo soportará.
Fueron años de palabras exageradamente destempladas. Años de tensar la cuerda demasiado hacia la derecha.


-- ** -- ** -- ** --

"Golpear juntos, marchar separados"

Ésta, debería ser nuestra consigna en esta hora. Como hicieron los compañeros de las CTA. No es con estigmatizaciones como nos recuperaremos. La primera persona del plural debe ser lo más amplia y contenedora posible. Golpeando juntos, y de ser posible, marchando juntos.
¿Cuántas veces cambiamos de opinión, cuántas nos equivocamos? ¿Nos traicionamos todas esas veces?
El tiempo es cruel, y continúa avanzando: no lo perdamos recordando viejas peleas.

Quería desearles que nuestro futuro sea para todos nosotros más importante y mejor que nuestro pasado.
No olvidemos el pasado, es lo que somos, pero no nos anclemos en él.
Construyamos y defendamos el futuro.


-- ** -- ** -- ** --

Entendieron todos mal. Y en vez de reconocer su error, acusan injustamente al actual presidente de incumplir indecentemente sus promesas.
Macri prometió: "Pobreza, CEOs". Si ustedes entendieron "Pobreza cero" háganse cargo.

Era evidente.

- * - * -

No me tomen por pendenciero, pero en los últimos tres meses hubo varias convocatorias a la Plaza de Mayo: la que menos gente convocó fue la asunción de Macri.

- * - * -

La frase con la que podremos definir la lógica política de los votantes del PRO es: "el que votó prejuicios, recibirá prejuicios".

Los argumentos para sostener las decisiones políticas de su gobierno los aportarán cuando nuestros salarios recuperen el poder adquisitivo que nos están robando de nuestros bolsillos para cederlo graciosamente a los miembros del ABC1. Inseguridad de diseño, inalcanzable para los chorros de antifaz.



Imagen: "Casas porteñas", de Raúl Soldi.





Para vivir no quiero islas, palacios, torres. ¡Qué alegría más alta: vivir en los pronombres! Quítate ya los trajes, las señas, los retratos; yo no te quiero así, disfrazada de otra, hija siempre de algo. Te quiero pura, libre, irreductible: tú. Sé que cuando te llame entre todas las gentes del mundo, sólo tú serás tú. Y cuando me preguntes quién es el que te llama, el que te quiere suya, enterraré los nombres, los rótulos, la historia. Iré rompiendo todo lo que encima me echaron desde antes de nacer. Y vuelto ya al anónimo eterno del desnudo, de la piedra, del mundo, te diré: «Yo te quiero, soy yo».
(Pedro Salinas)

No hay comentarios:

Publicar un comentario