miércoles, 10 de febrero de 2016

Poesía sutil que se lleva el viento

Dice Macri que gastemos un poco menos de lo que ganamos.
Quiero decir que no tengo problema con eso, es lo que siempre hago.
Con lo que tengo problemas es con ganar menos que antes, y que los capitalistas ganen más, a costa de mi merma salarial.
Si gano más, o al menos lo mismo, seguiré gastando menos que lo que gano, como siempre.
Y si gano menos, también gastaré menos de lo que gano, claro que también será menos de lo que necesito.

Sr. Presidente: no mienta, lo que usted quiere es que nosotros gastemos menos porque ganamos menos, para que ganen más sus socios de clase.
Porque el objetivo de su gobierno es robarnos de nuestros salarios todos los meses una porción, cada mes más grande, y dársela a los grandes empresarios, a los dueños de Argentina.
No los verdaderos dueños, ni los légitimos: los que siempre fueron los dueños.
Pese a las confusiones recursivas de los insensatos.

Entonces, cambiamos los "precios cuidados" por una app de ofertas de supermercados.
Lo interesante será ver cómo venden la "innovadora" política oficial para que no aumenten los precios.

Macri decía, y sin advertir que ahora gobierna sigue diciendo, que el gobierno anterior era malo porque nos cobraba el maligno impuesto inflacionario, y desde antes de asumir no hace otra cosa que incentivar la inflación.
Sin embargo no nos cobra ningún impuesto inflacionario. No, la clave para entender es, como siempre, la torta del PBI.
Acelerar la inflación con paritarias por debajo del aumento de los precios generales de la economía no es más que una transferencia de ingresos del sector del trabajo hacia el sector del capital.

Por eso la clave serán las paritarias. No tienen otro modo de conseguir sus objetivos.
En los próximos meses nos enteraremos si son lo que parecen, o nos sorprenden con una inesperada muñeca política.
De cualquier modo, conviene ser precavidos, porque nos quieren meter el dedo hasta el fondo, y hacernos perder todo el poder adquisitivo que puedan.

No sólo en el 2016. Esto recién empieza.


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Qué podemos esperar de personas cuya ideología no incluye la pasión por lo público.
Suponen que con las buenas intenciones y el sentido común alcanzan. Nunca se lo tomaron en serio.
Sí, ya sé que estoy siendo generoso, pero algunos, básicamente su base electoral, realmente tienen buenas intenciones.
Ni siquiera son seres malvados, son llanamente unas pobres personas.

Claro que quienes gestionan el gobierno saben lo que hacen. Crean que es lo mejor, o no, saben que le están jodiendo la vida a la mayoría; y que se la seguirán jodiendo.


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Los cálculos más conservadores nos indican que en lo que va de mandato del PRO nuestros salarios han perdido al menos un 10% de poder adquisitivo.
Eludiendo incorporar al cálculo la incidencia de sus declaraciones previas al ballotage.
Todo indica que la pretensión de la gestión del PRO es que este número se eleve a no menos del 20% para fin de año.
Un cálculo rápido nos indica que la distribución del PBI entre el sector del trabajo y el capital tendrá una corrección a favor del capital de no menos del 8%.
Para ser los primeros dos meses de su primer año no están haciendo tan mal su trabajo.
De nosotros depende que no tengan éxito.
No, no te equivoques, si al PRO le va bien, a nosotros nos irá muy mal.


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Lo más conveniente, probablemente, resulte de cultivar el pesimismo del intelecto, al tiempo que el optimismo de la voluntad.

Y que el tiempo decida...


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Este fin de semana, leí un libro muy recomendable, particularmente en estos tiempos:

"Economía para el 99% de la población", del coreano Ha-Joon Chang.


No es necesario devorarse las 500 páginas en cuatro días, se puede leer de a poco.
Es fácil de leer y de entender.
Sobre todo el resumen de la historia de la economía mundial.


Quizá lo malo, es confirmar una vez más, por si hiciera falta, que todo pinta a que los próximos años la vamos a pasar mal...


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Dice Seba Lacunza (y subscribo al pie):

Sobre los desmanes del Ministerio de Justicia con la agencia Infojus, un comentario de época. En la era analógica, si un funcionario quería cargarse un contenido tenía que lidiar con una logística complicada. Podía mandar el archivo al sótano más húmedo o someterse al oprobio de quemar libros en una plaza. Si con esfuerzo capturaba todas las ediciones, el censor alcanzaba la solución final.
En la era digital, la hemeroteca y la biblioteca comenzaron a construir un infinito. Cambió mucho la profesión periodística pero, más importante, la relación de la sociedad con el pasado público más o menos reciente. Vos, yo, todos seisieteochoizamos a diario vía Youtube, Google, etcétera. Buscamos las contradicciones del periodista estrella entre 2003 y 2015, y las encontramos con facilidad. Nos reímos, nos indignamos. Antes eso era más difícil. Para verificar la verdadera profundidad del compromiso de Grondona con los métodos nazis de la dictadura hubo que acudir a la hemeroteca (lo hizo una revista de Lanata recién a fines de los 90, cuando MG creía haberse lavado la cara).
Los borradores de Infojus también nos muestran que ese archivo total e inabarcable puede ser efímero, a vuelo de click. Peeero, los backups que están apareciendo por ahí también nos dicen que el fuego en la plaza pública era más efectivo.



Thousands of infojus articles taken offline

Censorship via click of a mouse

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Luego de despedir a varios trabajadores del portal de la Agencia Nacional de Noticias Jurídicas, las nuevas autoridades comenzaron con una tarea de limpieza de notas “incomodas” publicadas durante la anterior gestión.
En esta página se están almacenando para que no se pierdan:
Avestruz.com.ar


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Cada tanto encuentran que entre los despedidos había alguien que efectivamente cobraba sin ir a trabajar.
Y todos los garcas de nuestro barrio celebran el descubrimiento.
Imaginan que le aporta razón a su sinrazón.

Quizá sea pertinente recordar que el tristemente célebre Ramón Camps dijo sin miramientos que si caían noventa y nueve (99) inocentes por cada "subversivo" muerto, los cien estaban bien muertos.

Cualquier parecido entre las lógicas aplicadas no creo que sea coincidencia.


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Joaquín Morales Solá reclama la libertad de Milagro Sala.
Reclama que primero haya pruebas, luego juicio, y si se le prueba responsabilidad, recién ahí cárcel.
Como la lógica democrática demanda.

De modo que los que se regodean con el encarcelamiento por motivos extrictamente políticos de Milagro Sala, están a la derecha del mismísimo Jaco.
Incluso Morales Solá es más demócrata.



Imagen: Antonio Berni - Domingo en la chacra





Poesía de lo cotidiano: la de beber agua, la de comprar el pan, la escatológica, la que se compra en el supermercado.
Poesía eterna en los libros, Poesía fugaz escrita en vano.
Poesía de forma o contenido, Poesía de alegrías o lamentos, Poesía incrustada en nuestra mente, Poesía sutil que se lleva el viento.
(Pablo Ruoppolo)

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