Este genial poeta nacido en Barcelona el 13 de abril de 1928, era miembro de un familia burguesa y castellano-hablante, la que se vio brutalmente sacudida por la muerte de la madre -Julia Gay-, víctima de un bombardeo franquista sobre la ciudad en 1938. El dramático suceso afectó a todos, pero especialmente a José Agustín, quien puso a su hija el nombre de la madre perdida.
Uno de sus más célebres poemas (musicalizado por Paco Ibáñez), "Palabras para Julia", une voluntariamente, en amor y deseo, a las dos mujeres. Poema cargado de un intenso dramatismo, pero que a la vez contiene una enorme ternura. Son las palabras sobre la vida que le dirige a su hija, palabras tiernas, palabras duras, palabras confusas, pues él mismo confiesa en uno de los versos que “aún estoy en el camino”.
Palabras para Julia
Tú no puedes volver atrás
porque la vida ya te empuja
como un aullido interminable.
Hija mía, es mejor vivir
con la alegría de los hombres
que llorar ante un muro ciego.
Te sentirás acorralada
te sentirás perdida y sola
tal vez querrás no haber nacido.
Yo sé muy bien que te dirán
que la vida no tiene objeto
que es un asunto desgraciado.
Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.
Un hombre, sólo una mujer
así tomados de uno en uno
son como polvo, no son nada.
Pero cuando yo te hablo a ti
cuando te escribo estas palabras
pienso también en otros hombres.
Tu destino está en los demás,
tu futuro es tu propia vida,
tu dignidad es la de todos.
Otros esperan que resistas
que les ayude tu alegría
tu canción entre sus canciones.
Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.
Nunca te entregues ni te apartes
junto al camino nunca digas
no puedo más y aquí me quedo.
La vida es bella ya verás
como a pesar de los pesares
tendrás amor, tendrás amigos.
Por lo demás no hay elección
y este mundo tal como es
será todo tu patrimonio.
Perdóname, no sé decirte
nada más, pero tú comprende
que yo aún estoy en el camino.
Y siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti, como ahora pienso.
Como sin resignación quiere seguir luchando contra la injusticia, repite que quiere seguir en el bando de los rebeldes y sus sombras. Como la magistral versión original, la del artista único, intransigente y rebelde, quien convierte la poesía en un canto al amor, a la vida y a la libertad, la de una de las voces imprescindibles para la poesía, Paco Ibáñez.
Creación conjunta, que fue cantada por voces maravillosas, conmovedoras, como esta de la inmortal Negra Mercedes Sosa.
La universalidad es la característica más importante de este poema, la capacidad de percibirlo a través de la propia experiencia. Incluso, personas que carecen de experiencia vital se emocionan con él. Como con esta genial versión de la imprescindible entrerriana, la gran Liliana Herrero.
Voz que también fue final de una inolvidable, y también desgarradora película, "Kamchatka".
Una de las más célebres versiones fue la del eterno grupo de rock español "Los Suaves".
También la mítica Rosa León, hoy devenida en política, en la época en que caminaba por la música junto a Jorge Krahe cantó esta inigualable creación conjunta.
Actualizadión:
Y esta maravillosa versión, de Antonio Ranky y Bebe a la guitarra Jesuli...
Dato curioso es que la estrofa con más potencia, que más carga ideológica, la que dice: "Tu destino está en los demás, tu futuro es tu propia vida, tu dignidad es la de todos", no aparece más que en la versión de Liliana Herrero, y recitado al final. Todos han respetado la caótica re-interpretación que Paco Ibáñez ha hecho del poema, el dramático sentido profundamente humano con el que Ibáñez lo ha, de algún modo, reescrito.
"Poeta urbano", "poeta industrial" según J.Hierro, denominaciones que hay que atender pero sin olvidar que esa poesía "en mangas de camisa" se construye toda a base de mucha ironía, mucha sátira, algo de parodia y, frecuentemente, un sentido elegíaco en el tratamiento de la anécdota. Bebedor, fumador, vital, hombre de la vida entendida como libertad y como exceso, tuvo al final de su vida innumerables depresiones. José Agustín Goytisolo, murió el 19 de marzo de 1999 al precipitarse en extrañas circunstancias al vacío desde el balcón de su casa.
Mi hija se llama Julia por este poema, poema de un autor que descubrí con 13 años en la voz de Paco ibáñez.Se la canto desde pequeña. Ahora que mi hija sufre exclusión social que su mare se la cante es casi un lujo de terapia.
ResponderEliminarGracias Goytisolo, gracias Paco, gracias a mi profesor de literatura.